Antecedentes
En esos trajines de
la vida, mi papá José Luis Bracho Rodríguez, conoce a mi mamá Gladys María
Jurado Fernández, que al igual para aquellos años trabajaba como mas que
ayudante,era la mano derecha de su papá en la administración de la primera estación
de servicio del pueblo de la cual era propietario mi abuelo, Don Miguel Jurado,
y que de paso hasta donde habla la gente de ese tiempo, era y fue la única
estación de servicio de Venezuela que surtía de gasolina, gasolina blanca,
kerosene y gasoil de forma normal por surtidores.
Es por los
alrededores de los años 1965 que se casan mis padres, y de ese matrimonio yo José
Luis Bracho Jurado soy su segundo y único hijo varón, naciendo el día 24 de
junio del 1967 y mi hermana Gladys María Bracho Jurado dos años antes, ya que
ella fue la primera en nacer.
Niñez.
Este periodo de mi
vida transcurre sin contratiempo, y mis recuerdos rememoran una infancia feliz,
imágenes fugaces del autobús escolar vía al "kínder', y de la señora gorda y
regañona que nos cuidaba de no levantarnos de nuestros asientos vía al
Instituto Cardón, escuela privada fomentada con el beneplácito de la
corporación petrolera, la cual cuidaba con afinada saña el bienestar de sus
empleados, al igual que los entretenimientos, como el cine comunitario, los
clubes de nomina mayor, como los de nomina menor, club de golf, y el club de
playa para el embarcadero de yates y
lanchas para los trabajadores que gustaran de esta disciplina.
Mientras tanto mi
papá seguía escalando posiciones dentro de la industria, bajo la mirada guiada
de los holandeses que fomentaban el surgimiento de las personas con potencial
de aprendizaje y responsabilidad, este aprendizaje y dedicación lo llevaron de
ayudante de electricista a asesor de las compañias petroleras como; PDVSA, CITGO, TOTAL, entre otras, y quizás
fue con los largos y duraderos viajes de capacitación en Inglaterra, Holanda,
EEUU, los que iniciaron la fragmentación conyugal que se hizo un hecho con el
divorcio entre mis padres, cuando yo
cumplía los ocho años aproximadamente. Pero como para papá sus fortalezas se
consolidaron en tres virtudes básicas, objetividad, audacia y sentido de
responsabilidad (Bracho, 2009), nunca a la familia nos falto nada, todo era
programado con sumo cuidado, desde nuestra alimentación, educación y el vivir en un ambiente cómodo.
Pubertad.
Era un estudiante
ligeramente superior al promedio, ya que mis tiempos para el estudio era
reducido debido a la alta actividad deportiva que realizaba en esta época,
poseía habilidades para los deportes, con buen rendimiento para realizarlos,
jugué beisbol en Criollitos de Venezuela, practicaba y jugaba torneos
regionales de tenis, pertenecía a la selección de atletismo del colegio, el
cual representaba en juegos intercolegiales, además de la gran pasión de todos
los deportes que practique, fue el golf, el cual represente mi estado en tres
ocasiones, además de torneos nacionales y clasificatorios de sudamericanos,
ganando en mi región más de cincuenta torneos, en categoría libre siendo aun un
juvenil, al punto de que mi papa me fue restando apoyo al ver que tomaba el
deporte muy en serio, ya que en ese momento el modelo a seguir eran los
estudios, y ante todo tenía que ser un profesional universitario, que yo ”aprovechara
la oportunidad que él no tuvo”.
Adolescencia.
Cursaba en cuarto
año en el Instituto Cardón cuando reprobé el curso, mi papa dijo que no
apoyaría mas mi golf, lo cual fue para mí un profundo periodo de reflexión que
marco mi vida, me vi descubierto y frágil al perder mi personalidad que me daba el deporte, y decidí
y me fui a vivir con la anuencia de mis padres, con una tía que me quiere mucho
y siempre me brindo protección, y estudie el cuarto y quinto año en el liceo
‘J.M. Siso Martínez “ en la ciudad de Barquisimeto, pasando eximido y
demostrando a mis padres que era la falta de concentración la baja de mi
rendimiento en los estudios.
Periodo de Estudio Universitario.
La ciudad de
Barquisimeto me abrió al mundo, en el sentido que vivía en un campo petrolero
donde no faltaba nada a la comunidad, y done todo circulaba alrededor de la refinería,
a pasar a vivir a una ciudad abierta plural y diversa, con todos los problemas
y es donde yo logro dar cuenta de la
mayor madurez de la gente, y fue allí donde empecé a tener atracción por los
animales, a ver el campo agropecuario no solo en revistas y propagandas
televisivas, sino a sentirlo de cerca con un compañero de estudio el cual su
papa tenía una granja, donde había varias gallinas, caballos, vacas y chivos. Pero esta relación con el campo fue la que despertó a un muchacho de un
campo petrolero mirar el campo agrícola con otra visión. Este despertar me
motivo al punto de estudiar Zootécnia en la Universidad Rafael Urdaneta en la ciudad de Maracaibo, logrando graduarme para el año 1997, y luego realizando equivalencias por un llamado propio de la
universidad, ya que el consejo de universidades le cambiaría el nombre a la
carrera por Ingeniería en Producción Animal, logro estas en el año 2006.
Periodo Laboral.
Una vez graduado inicio mi primer trabajo en la empresa
agropecuaria El Tunal, ubicada está en la población de Quibor en el estado
Lara, para la cual fui supervisor de
tres granjas que formaban un
complejo de gallinas ponedoras
comerciales productoras de huevos de consumo, donde se albergaban
aproximadamente un millón de gallinas, en esta empresa labore por dos años y
medio aproximadamente. Luego inicie a trabajar por el año 2001 con la empresa
Avícola de Occidente C.A. en la ciudad de Maracaibo, también con el cargo de
supervisor avícola en la cría, recría y producción de gallinas reproductoras
pesadas, y desarrollando mi trabajo en las granja ubicadas en los estados
Falcón, Trujillo, Mérida y Zulia, donde permanecí durante un periodo de nueve
años.
Luego me llega la
oportunidad de laborar en una nueva empresa, Avícola La Guasima del estado
Carabobo, con sede de una empresa subsidiaria
en Falcón, Proken C.A., la cual me contrata como gerente de granja para
dirigir un plantel de gallinas progenitoras pesadas, teniendo la satisfacción
de haber trabajados con estas aves ya que a nivel de Latinoamérica serán quince
granjas de este tipo en la región, habiendo en Venezuela solo tres de su tipo,
fue una experiencia que me mostro que tenia conocimientos por aprender y lo cual motivo en mi hasta hacer un
diplomado en” Habilidades Gerenciales” en la Universidad de Falcón, para estar
a la altura de la situación.
Ingreso nuevamente a Avidoca en el año 2011, pero esta
vez como Sub-gerente de Reproductoras Pesadas y a cargo de la supervisión
directa de las granja ubicadas en el estado Trujillo y Mérida.
Vida Conyugal.
Estando trabajando
en Falcón conocí a una muchacha de nombre Leomarys Josefina Chirinos, con la cual me
case en el año 2008, es ella natural de la Sierra de San Luis, de un pueblo conocido como La Cruz de
Taratara, el encuentro fue que ella era
pasante de técnico medio en agropecuaria cuando la conocí, vivimos un tiempo
de concubinato hasta casarnos cuando ella se gradúa de técnico superior en
administración en Instituto Universitario de Tecnología Alonso Gamero de la
ciudad de Coro. Ha sido ella una compañera fiel y me ha entendido y acompañado en todas las
decisiones que me ha enfrentado la vida.
Vida Familiar.
En el año 2013, el
día 11 de Abril, nace mi primer hijo, un niño varón grande y hermoso en la
ciudad de Mérida, un día preocupante en la compañía de mi mamá esperamos desde
las 5:30 pm hasta las 9:00 pm la noticia de que la cesárea había sido sin
novedad y que tanto el niño como la madre estaban en perfecto estado, no podía
creer que mi bebe fuera tan grande y fuerte, estando aun en la incubadora.
Ya cuenta mi hijo
con tres años de edad, asistiendo todas las tardes a la guardería Mi Primer
Cole en la ciudad de Ejido, lo he puesto a practicar tenis, para lo cual aun no
presta mucha atención, sino que le gusta correr más detrás de las pelotas
cuando se da cuenta de lo fastidioso de darle a las pelotas con la raqueta.
Cada día le doy
gracias a dios por la bella familia que tengo, por dedicarle tiempo a disfrutar
de ellos, y que dios me de las fuerzas de poder ayudarlos por siempre en el
sentido de la realización personal, profesional y espiritual.
JLBJ. Mayo 2016
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