Llegué a este espacio de luz hace 48 años,
en la Maternidad de la capital del estado Mérida_Venezuela, ciudad hermosa, de paisajes
maravillosos, y con un agradable clima de montaña. Soy hija del matrimonio Flores Rojas, mis
padres se conocieron en la infancia, en un Pueblo llamado Aricagua, del Sur del
estado Mérida, lugar apacible, lleno de historias familiares, habitado por personas
humildes, cordiales, trabajadoras, respetuosas, dedicadas al campo; se casaron cuando ambos tenían 22 años de
edad, al año nací yo, la primogénita de cinco (5) hermanos, que llegaron con un
año de diferencia entre unos y otros.
Estudié primaria y secundaria en
diferentes instituciones públicas y privadas. Durante mi adolescencia aprendí a
tocar cuatro por la escuela de Música de la Universidad de Los Andes, y nos
presentamos dos veces en el Aula Magna, en una de las presentaciones hice de
solista con mi Profesor, fue un momento emotivo en mi vida.
Ingreso a la Facultad de Ciencias
Económicas y Sociales en la Universidad de Los Andes a estudiar Contaduría
Pública; durante el transcurso de mi
carrera falleció uno de los seres más importantes que la vida me regaló mi
Tía Abuela, fue una gran pérdida para la familia. Era un Ser lleno de amor,
dulzura, humanidad; la recuerdo con amor y añoranza, siempre sonreía. En ese momento cursaba matemática financiera,
mi profesor tenía el don de percibir más allá, se me acercó y me expresó su
solidaridad y afecto, y desde ahí una amistad de maestro a alumna nos unió en
el mundo espiritual, lo recuerdo como un ser de Luz.
Obtuve el título de Contadora Pública en la
Universidad de Los Andes, a los veintitrés (23) años, me faltó aprobar dos
materias para obtener el título de Administradora; el profesor de la asignatura
matemática financiera, me firmó el título universitario y, gratamente me sorprendió
con dos (2) cartas de recomendación, cada una con contenidos diferentes, para
cuando fuera a solicitar mi primer empleo como profesional.
En mi vida laboral he ocupado varios roles
en las áreas administrativa, contable y tributaria, también como docente
universitaria. Mantengo interés en
actualizar mis conocimientos a nivel profesional, autodidacta, asimismo he cursado
algunos diplomados, talleres y cursos en diferentes áreas vinculantes a mi
carrera universitaria.
En medio de mi actividad laboral, llega a
mi vida el ser más extraordinario, mi hija, quien me hace conocer el amor
perfecto, sublime, puro y en constante crecimiento. Risueña, de buen carácter y amorosa; es un
ser extraordinario, que te contagia esa alegría de vivir. Con ella disfruto la vida a plenitud. Saboreo con intensidad y pasión su
escolaridad, sus ratos de ocio, y sus actividades deportivas, artísticas y de
recreación.
Todo ese intercambio de experiencias y
vivencias han formado la persona que soy, y en búsqueda de respuestas a algunas
interrogantes, me interesé por leer acerca de la personalidad, el carácter y la
espiritualidad, Aprendí a ser tolerante,
paciente, tener control ante situaciones poco gratas; comprendiendo
y entendiendo al prójimo con respeto, no juzgando, solo aceptándome y encontrando
en medio de ello PAZ y regocijo.
Percibo la vida es un constante
movimiento, agradezco a quienes me han
acompañado a lo largo de mi existencia, y las experiencias que han dejado
huella; recibo con amor y expectación las
que están por llegar. Las que solo se
cruzaron en mi camino y ya no están, las
despido con respeto, gratitud y admiración.
Todo ha sido indudablemente gratificante, lleno
de matices y situaciones que me han permitido crecer y formar el ser que soy;
con experiencia y deseo de servir a quienes lo demanden; consciente, comprendiéndome,
aceptándome, amándome, y reconociéndome como parte de un todo.
Simplemente respirando, disfrutando y entregando
al universo lo que deseo recibir.
Gracias!!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario